Las cazuelas de barro tienen muchas ventajas, son térmicas, decorativas y si son vidriadas permiten la cocción de los alimentos sin casi nada de grasa. Tan solo requieren mínimos cuidados.
Curado de la cazuela de barro
Sí tenemos una cazuela u olla de barro nueva, el primer cuidado es “curarla.
1.- Sumergir por completo la cazuela en agua
Este proceso se realiza principalmente en piezas grandes como los cuencos, ollas y pucheros. El curado nos ayuda a cerrar el poro lo mejor posible para que la absorción de agua sea menor durante el guiso. Este proceso lo podemos realizar en cualquier cazuela de barro.
- Sumergiremos la cazuela por completo en agua durante unas horas (aprox. 6-8 horas).
“Observaremos que tras sumergir la cazuela en el agua empezarán a salir burbujas, eso significa que el poro se está llenando de agua”
- Transcurridas las 6-8 horas sacaremos la cazuela y la secaremos bien con un papel o paño.
- A continuación tras secarla le daremos con un diente de ajo por el culo de la cazuela, es decir, por la parte exterior de la cazuela en la zona que no está vidriada. (este ajo no trasmite nada de sabor ya que se da por la parte exterior y únicamente ayudará a cerrar el poro de la cazuela mucho mejor).
- Por último y tras darle el diente de ajo debemos dejarla secar bien antes de utilizarla, puesto que si la ponemos al fuego va a empezar a salir humo de la cazuela y pensaremos que hemos realizado mal el proceso o que la cazuela está en mal estado y no es nada de eso solamente es que el poro de la cazuela está lleno de agua y el humo nos vendrá de la evaporación de ese agua.
2º.- Proceso del horno eléctrico.
Este proceso se realiza en cualquier cazuela que nos entre dentro de nuestro horno eléctrico, cuenco pequeño, paellera, cazuela con tapa, asadoras rectangulares y ovaladas (< de 40cm) y cazuela alta.
El proceso consiste en lo siguiente:
- Llenaremos la cazuela de agua y trocearemos dentro 2-3 patata.
- -Posteriormente la introduciremos en el horno eléctrico sin precalentar, es decir, desde el momento uno que pongamos el horno en funcionamiento a una temperatura de 150-170 ºC. La cazuela poco a poco irá cogiendo temperatura y tras pasar un tiempo la patata se nos cocerá, en ese momento apagaremos el horno y con cuidado a no quemarnos sacaremos la cazuela.
- A continuación y tras estar la patata ya cocida, tiraremos el agua y las patatas. (La función del agua y la patata es eliminar el sabor del barro y cerrar el poro de la cazuela).
- Para finalizar este proceso secaremos la cazuela con un papel o paño y al igual que el proceso anterior le daremos con un diente de ajo en el culo de la cazuela para ayudar a cerrar el poro mucho mejor.
En este proceso la cazuela estará lista para ser usada, sin necesidad de dejarla secar.
- Estos procesos se realizan únicamente una sola vez antes de utilizar la cazuela, una vez utilizada una vez el proceso es igual que una cazuela normal.
- El fin de estos procesos es ayudar a cerrar el poro de las cazuelas de barro para un mejor funcionamiento.
- Para una correcto uso, una vez utilizada la cazuela, fregarla y secarla con un papel absorbente para quitarle la mayor humedad posible y a guardar.
Cómo cuidar cazuelas de barro
Se aconseja remojar la cazuela en agua simple durante unos minutos. Esto se debe hacer antes de cada uso. Las cazuelas de barro sin vidriar no se deben de meter directamente al horno muy caliente, es mejor meterlas estando el horno frío o tibio y dejarlo calentarse hasta la temperatura ideal, pues de meterlo en el horno hirviendo podría quebrarse o irse agrietando.
No es aconsejable poner una olla de barro caliente directamente en una tabla o superficie fría, los cambios bruscos de temperatura pueden hacer que se agriete por debajo, lo mejor es colocar un paño de cocina bien acomodado que resista el calor.
Limpieza de ollas de barro no es necesario usar detergentes o jabones, muchos dejan películas o moléculas de los mismos en los poros del barro. Cuando usamos nuevamente nuestra olla el calor hace que el sabor del jabón suba y nuestros alimentos adquieren ese aroma. Así que en lo posible evitaremos usar jabones, detergentes y limpiadores químicos.
El bicarbonato es la mejor opción para limpiar el barro y quitarle malos olores, solo tenemos que lavar nuestra olla con agua y un cepillo y hacer una pasta con agua o vinagre y el bicarbonato, dejamos ésta pasta actuar media hora y la enjuagamos con agua simple.
Otro consejo para cuidar cazuelas de barro es secar bien las ollas antes de guardarlas, si es posible es mejor que se sequen al sol directo. Una vez secas es importante que al guardarlas pongamos la tapa al revés, y con una servilleta entre la olla y la tapa para asegurar que entre el flujo de aire, así evitaremos el moho. En caso de que salga moho, solo tenemos que repetir la pasta de bicarbonato, enjuagar y secar bien al sol.
También se pueden guardar impregnadas en la pasta de bicarbonato, antes de usarla basta con enjuagar y secar, así evitamos el moho.